Shadhiliya Darqawiya Al-Alawiya

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jueves, diciembre 10, 2015

Ibn Arabi - Mi corazón puede adoptar todas las formas محي الدين بن عربي




Ibn Arabi Al Andalusi _ El interprete de los deseos

Mi corazón puede adoptar todas las formas

ترجمان الأشواق - ديوان الشيخ الأكبر محي الدين بن عربي الحاتمي الأندلسي
موال : لقد صار قلبي قابلا كل صورة
فمرعى لغزلان و بيت لأوثان
و دير لرهبان و كعبة طائف
و ألواح توراة و مصحف قرآن
أدين بدين الحب أنى توجهت

ركائبه فالحب ديني و إيماني


Mi corazón puede adoptar todas las formas:
Es pasto para las gacelas,
Y monasterio para monjes cristianos,
Y templo para idolos,
Y la Kaaba para el peregrino,
Y las tablas de la Torá y el libro del Corán.
Yo sigo la religión del amor,
Cualquiera que sea el rumbo
Que tienen los camellos
Ésa es mi religión y mi fe.

Ibn Arabi.


"La religión del amor" Ibn Arabi





¡Qué maravilla un jardín

en medio de tanto fuego!

Mi corazón puede adoptar todas las formas:

Es prado para gacelas

y monasterio para monjes cristianos;

Templo para los ídolos,

Kaaba para los peregrinos;

Las Tablas de la Torá

y es el Libro del Corán.

Yo sigo la religión del amor

adonde se encaminen

sus monturas, que el amor

es mi práctica y mi fe.

Ibn Arabi, Taryumân al-ashwâq (El intérprete de los deseos). Casida XI. (Trad. P. Beneito)


Qué dolor en mi corazón...¡qué dolor!...

Qué gozo en mi alma...¡qué gozo!...

en mi corazón arde la pasión como un fuego...

en mi alma se ha puesto una luna de tiniebla...

Oh almizcle...oh luna...

Oh ramos sobre la duna...

Qué verde...qué esplendor---

cuánto aroma...

oh boca sonriente cuya humedad adoro...

saliva cuya miel he probado...

luna revelada...con las mejillas cubiertas...

del rojo atardecer...

desnuda de sus velos...

sería tormento y por ello es esquiva...

sol mañanero que escala los cielos...

ramo de duna en un jardín plantado...

cuando se levanta es maravilla en la mirada...

cuando se pone es causa de mi muerte....

lo contemplo sin pausa...con temor reverente...

y riego el ramo con suave lluvia celestial...
Si el creyente entendiera el significado del dicho “el agua adopta el color de su recipiente”, admitiría la validez de todas las creencias y reconocería a Dios en toda forma y en cada objeto de fe.
Ibn Arabi, Fusûs al-Hikam


Dios se me apareció en el fondo del alma y me dijo "hazle saber a mis siervos aquello que has verificado de mi generosidad... ¿Por qué mis siervos pierden la esperanza en Mi Misericordia, cuando Mi Misericordia lo abarca todo?"

Ibn Arabi. Futuhat I. 709. Trad. al inglés por Claude Addas, "La Quête du Soufre Rouge".
Ibn Arabi (Murcia, 28 de julio de 1165 – Damasco, 16 de noviembre de 1240), fue el más grande maestro espiritual sufí, filósofo, poeta, viajero y sabio.
Más información en:
http://ibnarabisociety.es/index.php?pag=2

Mi Religión Es La Religión Del Amor (Adīnu Bi-Dīni L-Ḥubb)





Antes de hoy, habíaLa-qad kuntu qabla l-yawmi
لقد كنتُ قبلَ اليوم
negado a mi compañerounkiru ṣāḥibī
أنكِرُ صاحبي
cuando mi religión no era cercana a la suya.iḏā lam yakun dīnī ilà dīni-hi dānī.
إذا لم يكنْ ديني إلى دينِه داني
Mi corazón se ha transformado en receptor de toda forma:La-qad ṣāra qalbī qābilan kulla ṣūratin
لقد صار قلبي قابلاً كلّ صورةٍ
Prado para las gacelas,fa-marʿan li-gizlānin
فمرعى لغزلان
monasterio para los monjes,wa-dayrun li-ruhbāni
وديرٌ لرهبان
casa para los ídolos,Wa-baytun li-awṯānin
وبيتٌ لأوثان
la Kaʿba para el peregrino que la circunvala,wa-kaʿbatu ṭāʾifin
وكعبةُ طائفٍ
las Tablas de la Torahwa-alwāḥu tawrātin
وألواح توراة
y copia escrita del Corán.wa-muṣḥafu qurʾāni
ومصحفُ قرآنِ
Mi religión es la religión del amor;Adīnu bi-dīni l-ḥubbi
أدين بدين الحبِّ
dondequiera que se dirijan las monturas del amor,annā tawaŷŷahat rakāʾibu-hu
أنّى توجّهــت ركائبه
el amor es mi religión y mi fe.fa-l-ḥubbu dīnī wa-īmānī
فالحبُّ ديني وإيماني





Pensamiento:


Tumba de Ibn 'Arabi en Damasco.
Aunque los estudios orientalistas españoles lo han relacionado con la escuela de Ibn al-Arif (Abenalarif), y lo consideraron inicialmente más un filosofo que un sufí, los maestros sufíes de muchas órdenes en el sufismo desde hace siglos lo han considerado como un gran maestro conocedor por 'experiencia (espiritual) directa', al que incluso han dado el calificativo de Sheij al Akbar, o el más grande de los maestros. En la literatura académica occidental contemporánea, en esa línea, los estudios de su obra llevados a cabo por autores como Michel Chodkiewicz, William Chittick, Denis Gril y en España por Pablo Beneito, muestran claramente que su contacto con las escuelas aristotélicas de Alfarabi y Averroes o la filosofía neoplatónica de la escuela de Ibn Hazm fue muy superficial.

Su obra es, ante todo, de carácter gnóstico-religiosa; sus críticas al entendimiento meramente externo y árido de la religión e incluso a la filosofía misma son abundantes en su obra. Pero es evidente que no es un simple "místico": el contenido metafísico de su obra abarca desde la interpretación gnóstico-sapiencial de la sharia (Ley Islámica) -siempre con una cierta visión zahirí como la de Ibn Hazm, pero a la que supera ampliamente- hasta una cosmología basada en la revelación divina y de su Unicidad (que fue bautizada por sus sucesores como la Unicidad de la Existencia o Wahdat al-wuyud).

La doctrina de Ibn Arabi abunda en el carácter absoluto de Dios como unidad suprema. Esta niega cualquier tipo de analogía entre Dios y lo creado -por lo tanto escapando del panteísmo que le han adscrito algunos- pero también desarrollando una compleja relación de lo creado con el Creador, del que es una expresión de sus diferentes Nombres y Atributos (Allahu al-asma al-husna), que inició Sahl al-Tustari. Esta radical separación de Dios y su creación impide su conocimiento racional de Dios como Esencia, pero no impide su conocimiento a través del develamiento, o sea, de la certificación o Realización de la Realidad (Haqq) de las cosas, que no es otro que Dios. Con él el sufismo alcanza el desarrollo más refinado de la expresión de la elaboración teórica del sufismo.


Al igual que los neoplatónicos aplica una escala jerárquica de géneros y especies entre la no existencia al ser creador, que se relaciona a su vez con su idea del amor también compuesto de una serie de grados que van desde la simpatía o inclinación hasta el puro amor.



Obra:


Sus obras son más de 200. Osman Yahya las ha catalogado, ha editado algunas de ellas y ha desmentido algunas atribuciones de obras como la epístola de la Unidad o el Núcleo del núcleo.

Su obra más importante es el al-Futuhat al-Makkiyya, traducido habitualmente como Las Iluminaciones de la Meca o Las Revelaciones de la Meca, que es un compendio de metafísica islámica, aunque abarca la mayoría de las ciencias tradicionales islámicas en sus más de tres mil páginas.

Su otra obra de importancia es el Fusus al-Hikam (Los Engarces de la Sabiduría), síntesis de su pensamiento metafísico, de la unidad de las creencias y de profetología en el Islam.

Otras obras destacadas:

EL DIVINO GOBIERNO DEL REINO HUMANO:






Libro del Tesoro de los amantes, Kitāb Dajā'ir al-a'lāq
Libro de la Política Divina, Kitāb al-tadbīrāl al-Ilāhiyya
Libro del descenso de los astros, Kitāb mawāqi' al-nuyūm
Libro del Viaje místico, Kitāb tuhfat al-safara
Epístola del precepto obligatorio, Risālat al-Amr al-muhkam
Epístola de las luces, Risālat al-anwār
El gran Diwan Al-Diwan al-akbar
El intérprete de los deseos, Taryuman al-ashwaq.
La contemplación de los Misterios
El Árbol del Universo (atribución discutida).
La maravillosa vida de Du-l-Nun el Egipcio
El núcleo del núcleo (atribución falsa)

El secreto de los nombres de Dios





martes, diciembre 08, 2015

Que es ser Un Sufi?

Maestro, realmente ¿qué es ser sufí? – preguntó el muchacho. Entonces el maestro le tomó de la mano y le llevó a un lugar donde decenas de criaturas padecían todo tipo de sufrimientos a causa de terribles enfermedades: hambre, vejez, las injusticias de los hombres, miseria etc., y, señalándolos a todos, con lágrimas en los ojos, contestó: - Cuando sientas el sufrimiento de todos estos seres como si fuera el tuyo propio podrás llamarte sufí – Pero el discípulo, muy contrariado, volvió a preguntarle: - Entonces ¿qué es la iluminación? – Hijo mío – contestó el maestro – La iluminación es el estado del alma por el cual rezas para que todos los seres puedan verse libres del sufrimiento, aunque tengas tú mismo que cargar con él por ellos – Temblando de la cabeza a los pies, el joven retrocedió balbuceando – Pero, maestro, ¿cómo podría alguien desear para sí tanto dolor? – Por Amor, hijo mío, solo por Amor. Y quien ha aprendido a amar de esta manera, alcanza la verdadera iluminación, porque en el camino del amor no hay rebajas -

LA ALQUIMIA DE LA FELICIDAD


ABU HAMID AL GHAZALI.-(1058/1111) Teólogo, filósofo, pensador y estudioso del Tasawuf).
Debéis saber, amados míos, que el hombre no fue creado en broma ni por casualidad, sino que fue maravillosamente hecho con un gran destino. Aunque no está hecho de materia perdurable, vive para siempre; y aunque su cuerpo es mezquino y terrenal, su espíritu es elevado y divino.
Cuando en el crisol de la abstinencia se le separa de las pasiones carnales, alcanza lo más alto, y en el lugar de ser esclavo de la lujuria y de la ira, queda investido de cualidades angelicales. Al alcanzar tal estado, encuentra su cielo en la contemplación de la belleza Eterna, y nunca más en las delicias de la carne.
La alquimia espiritual que provoca este cambio en él, como la que transmite los metales viles en oro, no es fácil de descubrir, ni se puede encontrar en la casa de cualquier anciana.
El erario de Dios, donde tal alquimia debe ser buscada, está formado por los corazones de los profetas, y aquel que la busque en otro lugar quedará defraudado y en bancarrota el día del Juicio, cuando siga las palabras:
-“Hemos retirado el velo que te cubría y hoy tu imagen es nítida “.
Dios ha enviado a la tierra ciento veinticuatro mil profetas para enseñar a los hombres la prescripción de esta alquimia y como purificar los corazones de sus cualidades más viles en el crisol de la abstinencia.
Esta alquimia se podría describir brevemente como un alejarse del mundo acercándose a Dios. El conocimiento de uno mismo es la clave del conocimiento de Dios, de acuerdo con el dicho:
-“Aquel que se conoce a sí mismo conoce a Dios”, y tal como está escrito en el Corán, “Les mostraremos nuestros signos en el mundo y en ellos mismos, para que la verdad les sea revelada”.(Qur´an 41:53)
Nada hay más cerca de ti que tú mismo, y si no te conoces a ti mismo ¿cómo puedes conocer ninguna otra cosa? Si dices:
- “Me conozco a mí mismo”, refiriéndote a tu aspecto exterior, a tu cuerpo, tú cara, tus miembros, etc., tal conocimiento nunca puede ser la clave para el conocimiento de Dios.
-¿Y cómo podrías avanzar por este camino, si tu conocimiento de lo que hay dentro de ti no alcanza más allá que el saber que cuando tienes hambre, comes, y cuando te sientes iracundo, atacas a alguien? Pues en esto las bestias son iguales que tú. Pero el auténtico conocimiento de uno mismo consiste en saber.
- Qué eres tú en ti mismo y de dónde vienes; hacia dónde vas y con qué objeto has venido a detenerte aquí un momento, y en qué consisten tu auténtica felicidad y tu auténtica miseria.
Algunos de tus atributos son los mismos de los animales, otros, de los diablos, y algunos, de los ángeles, y tienes que investigar cuales de estos atributos son accidentales y cuales son esenciales. Hasta que no sepas esto no podrás saber donde radica tu auténtica felicidad.
Es propio de los intelectuales débiles tomar a los hombres como criterio de verdad y no la verdad como criterio de los hombres. El hombre inteligente sigue a Ali, esté Dios satisfecho de él, cuando dice:
- No conozcáis la verdad por los hombres, más bien conoced la verdad, y entonces sabréis quiénes son verídicos.
El hombre inteligente conoce la verdad; luego examina cada aserto en particular, y si es verdadero, lo acepta, al margen de que lo manifieste un hombre veraz o no... Porque sabe que el oro se halla en la arena mezclado con la escoria.
La cuestión del conocimiento divino es tan profunda que en realidad solo la conocen aquéllos que la poseen. Un niño no tiene verdadero conocimiento de los logros de un adulto.
Un adulto corriente no puede comprender los logros de un hombre ilustrado. Del mismo modo, un hombre ilustrado no puede comprender las experiencias de los creyentes iluminados.
Has de saber que el Islam tiene dos momentos. El primero consiste en abandonar las malas costumbres, y el segundo adoptar las buenas cualidades. El primer paso es el más difícil pues exige de un gran esfuerzo en la lucha contra la rutina.
El Profeta Muhammad (saw) dijo:
-“Emigrante (muhayir) es el que abandona el mal y combatiente (muhayid) es el que lucha contra su propia arbitrariedad.
El hombre busca su perfección espiritual mediante el sentimiento religioso, que procede del conocimiento y se manifiesta en las acciones justas. Si no hay frutos, el conocimiento no es el adecuado... Que Dios nos guíe...